jueves, 18 de octubre de 2007

“A la reforma constitucional le quitaron la careta”

Caracas, 18 de octubre de 2007.- Ya no existe ninguna duda sobre las verdaderas intenciones del Presidente Chávez y del Comunismo Caribeño sobre la imposición al pueblo venezolano de un gobierno dictatorial, antidemocrático y militarista. Así lo manifestó Johnson Delgado, presidente de COPEI - Táchira.

Agregó que la Asamblea Nacional “le quitó la careta que faltaba a la propuesta de Reforma. Esa careta estaba escondida y el domingo pasado se la quitaron. Ahora pretenden introducir 25 nuevos artículos, distintos a los presentados por el Presidente, para liquidar definitivamente todos los derechos humanos consagrados en la Constitución de 1999”.

El dirigente de la tolda verde aseveró que de aprobarse este “Golpe constitucional” cualquier venezolano o venezolana sin distingo de que sea o no sea chavista, puede ser señalado en cualquier lugar del país como “enemigo del régimen” y encarcelado de inmediato, sin que medie ningún juicio, sin que se observe el debido proceso judicial.

“Bastará que algún miembro de la mal llamada revolución, le ponga el ojo y lo mande a meter preso. Además, no se permitirá que se divulgue por prensa y radio lo que suceda en el país, puesto que viviremos permanentemente en un Estado de Excepción. Esas serán las garantías que nos espera a todos los venezolanos”.

Señaló que toda esta “tramoya” montada en el libreto de la reforma constitucional forma parte de una estrategia maquiavélica talmente tramada por Fidel Castro y Hugo Chávez, “con el fin de apoderarse del país, de sus riquezas y mantener humillado al pueblo, como tiene Fidel Castro a los cubanos”.

Por otra parte, Delgado expresó que todo el planteamiento de la reforma constitucional está plagada de vicios de inconstitucionalidad y su discusión en el Parlamento es violatoria del propio Reglamento Interior y de Debates de la Asamblea Nacional.

Recalcó que la introducción de nuevos artículos distintos a los presentados en la propuesta original, viola el artículo 344 de la Constitución vigente, toda vez que éste señala: “La iniciativa de la Reforma Constitucional será tramitada por la Asamblea Nacional en la forma siguiente: El Proyecto de Reforma Constitucional tendrá una primera discusión en el período de sesiones correspondiente a la presentación del mismo. Una segunda discusión por Título o Capítulo, si fuera el caso. Una tercera discusión por artículo”.

Asimismo enfatizó que los 25 artículos nuevos no han tenido este tratamiento constitucional y reglamentario; por tanto su procedimiento -que actualmente se adelanta en el parlamento nacional- “está viciado de inconstitucionalidad e ilegalidad”.

Por tanto, hizo un llamado a todos los venezolanos para que tomen conciencia del “inminente peligro de destrucción del sistema democrático en nuestro país y la instauración de una Dictadura Comunista sí se llega a aprobar por cualquier método esta Reforma Constitucional. Nuestra conducta debe ser de rechazo total e inminente a este proyecto de desdibujar nuestra nacionalidad venezolana y nuestras tradiciones democráticas”.

Johnson Delgado también invitó a luchar unidos por la libertad, para defender lo que le pertenece a cada ciudadano. “Es la hora de la Unidad Nacional, de emprender una lucha sin regreso, firme y decidida para devolverle al país la paz, la tranquilidad, la inversión, el trabajo y la prosperidad”.

“Desde aquí hacemos un llamado de Unidad, vamos a reunir a todos los factores de la sociedad venezolana y de la sociedad tachirense. No podemos quedarnos con los brazos cruzados a la espera de que otros hagan las cosas por nosotros. Debemos asumir nuestra cuota de responsabilidad en esta hora histórica de la Nación venezolana: O la defendemos hasta triunfar o se la entregamos a los enemigos de la libertad, de la paz y de la prosperidad”.

Por último esbozó el artículo 333 de la Constitución, que reza: “Esta Constitución no perderá su vigencia si dejase de observarse por acto de fuerza o porque fuere derogada por cualquier otro medio distinto al previsto en ella. En tal eventualidad, todo ciudadano investido o ciudadana investida o no de autoridad, tendrá el deber de colaborar en el reestablecimiento de su efectiva vigencia”.

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