COPEI Partido Popular, la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), el Instituto de Formación Popular, presentaron este viernes el seminario “Democracia y Libertad de Expresión” que contó con la participación de Manuel Espino, presidente de la ODCA, William Echeverría, Marcel Granier, Alberto Federico Ravell y Eduardo Fernández, Luis Ignacio Planas y Orlando Contreras Pulido.
La presentación del seminario estuvo a cargo de Luis Ignacio Planas, secretario general nacional de COPEI Partido Popular, quien señaló que las libertades en general corren un riesgo enorme en Venezuela.
“Para nadie es un secreto lo difícil que se ha convertido para nuestros medios de comunicación, para quienes ejercen el periodismo hoy en día cumplir con su función. Función que es vital para todos los ciudadanos, función para que todos podamos saber lo que está pasando en el país, para que podamos conocer lo que ocurre en Venezuela y el mundo”.
Rechazó las agresiones a las que han sido objeto los perdidositas y los medios de comunicación en los últimos años. “Agresiones personales contra sus equipos, han sido perseguidos por los Tribunales, han sido enjuiciados, se les ha aplicado el terrorismo judicial, cada vez es más difícil que los venezolanos podamos tener una información veraz, porque además existe la pretensión por parte del gobierno de tener un monopolio comunicacional”.
William Echeverría, periodista de Globovisión y CNB, en su presentación mostró gráficas del informe 2006, “Venezuela en situación del derecho a la libertad de expresión”, donde se encontraban citados más de cien denuncias de restricción al derecho de libertad de expresión en Venezuela. “De acuerdo al estudio hecho por esta organización no gubernamental 35.1% de los casos se refieren a la intimidación; 15.8% a la agresión; 13.9% a amenazas; 13.9% al hostigamiento judicial”.
Luego de hacer su ponencia sobre casos específicos donde se denunciaron agresiones a perdidositas venezolanos, el profesional de la comunicación preguntó: “¿Es posible la reconciliación en Venezuela?”.
Marcel Granier, Presidente de las Empresas 1BC, destacó que hablar de libertad de expresión, implica hablar de las libertades, los derechos humanos en general y de la democracia.
“la libertad es un derecho natural, humano, precede a toda ley y constitución, está por encima de ellas, y en la medida en que se ejerzan sin dañar a los demás, están por encima de cualquier disposición legal”, dijo Granier.
Explicó que en muchas oportunidades se tiende a simplificar los conceptos de libertad de expresión y el concepto de democracia. “Pensamos que hay Libertad de Expresión cuando una persona puede hablar mal del Presidente de la República, y que hay democracia cuando ocurre un proceso electoral. Pueden ocurrir procesos electorales sin que haya democracia, porque los mismos no son transparentes, porque en ellos el voto no es ni libre, ni secreto, ni limpio, ni se respeta la voluntad del elector”.
Agregó que lo mismo sucede en materia de libertad de expresión, “el que se pueda hablar mal del Presidente de la República o de cualquier persona, no quiere decir que hay libertad de expresión. La libertad de expresión existe cuando una persona puede expresar libremente su pensamiento sin temor a represalias o agresiones”.
De esta manera, hizo mención al caso venezolano. “En el caso de Venezuela, tristemente, el Presidente de la República, ha venido practicando de una consecuente, continua, reiterada, sistemática y metódica un discurso de odio, dirigido a todas aquellas personas que piensan distinto a ellos”.
Proceso involucionario
En otro orden de ideas, para Eduardo Fernández, dirigente de COPEI, señaló que Venezuela está viviendo una coyuntura histórica, y lo que está en juego es un derecho fundamental. “La democracia en general, pero en particular, la libertad de expresión, está grave y severamente amenazada”.
Recalcó la importancia que tiene la información libre, derecho consagrado en todos los convenios internacionales suscritos por Venezuela. Asimismo citó el artículo 57 de la Constitución Nacional, que consagra el derecho a la libertad de expresión y el artículo 58 consagra el derecho a la libertad de información.
Le aclaró al Presidente de la República, Hugo Chávez, que esos derechos le pertenecen a los seres humanos antes de que existiera el Estado. “Por encima del Estado los seres humanos tenemos derecho a la vida y derecho a los derechos fundamentales, dentro de los cuales está la libertad de expresión, de pensamiento y de información”.
También denunció, ante propios y extraños, que en Venezuela está en marcha una estrategia grosera para instaurar un régimen dictatorial, “un régimen absolutista y uno de los elementos fundamentales, una hegemonía mediática que el gobierno pretende establecer para poner en vigencia un pensamiento único y para evitar el debate plural en la población, que permita el surgimiento de alternativas frente al régimen imperante”.
Por último, Alberto Federico Ravell, Director de Globovisión, presentó a la audiencia una serie de videos, donde se mostraba claramente los abusos y agresiones a los que han sido sometido los profesionales de la comunicación.
“El chavismo es una amenaza Latinoamericana”
En otro orden de ideas, Manuel Espino, Presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América ODCA y presidente del Partido Acción Nacional de México, expresó su solidaridad a los periodistas de Venezuela por mantener una lucha a favor de la libertad de nuestros pueblos, a la vez que criticó la “amenaza del chavismo” en Latino América.
“La principal amenaza demagógica, populista y autoritaria que pretende desparramarse en nuestro querido continente, tiene su foco principal de infección en Venezuela”, dijo el presidente de ODCA.
Subrayó que en toda la América Latina hay preocupación por lo que sucede en Venezuela. “Muchos somos los latinoamericanos que estamos deseando un cambio de situación en la hermosa Venezuela, también queremos que ese camino sea contagiado al resto de los países latinoamericanos”.
Como presidente de Organización Demócrata Cristiana de América, señaló que en el ejercicio de la responsabilidad de la ODCA propone como un método alternativo al populismo demagógico, autoritario, repensar y rediseñar la democracia en Latinoamérica.
Declaró que uno de los retos y desafíos en el Continente, es que para que haya una democracia abierta, plural, incluyente, se requiere un cambio interior de actitud, “el reto fundamental en este contexto es encontrar una razón superior para unirnos los que pensamos diferentes y buscar los mayores puntos de coincidencia.”
Chavismo es un dolor evitable para Latinoamérica
“El chavismo es una dolencia Latinoamericana, a Chávez lo padecemos en México, allá tenemos más de doscientos círculos bolivarianos que nos han hecho grandes daños sociales”, afirmó Espino.
Destacó que en México, el chavismo se ha metido en procesos electorales, “estuvo punto de imponernos como presidente de la república a un Manuel López Obrador, patrocinado con dinero de todos los venezolanos”.
Dio a conocer que en esa oportunidad, afectos al gobierno de Chávez tomaron las calles y plazas principales de México, “se llegó a proponer las medidas violentas en plena campaña electoral impulsadas por Chávez, los agravios del Presidente venezolano al presidente Mexicano ha sido motivo de dolor nacional. El Chavismo es un dolor evitable para los latinoamericanos”.
Por último agregó que vino a Venezuela para proponer unión entre las regiones, “pero por lo pronto asumamos algo como un pretexto, el chavismo que es una amenaza a la América Latina es un buen pretexto para unirnos en torno de ese propósito fundamental”, concluyó Manuel Espino.
La presentación del seminario estuvo a cargo de Luis Ignacio Planas, secretario general nacional de COPEI Partido Popular, quien señaló que las libertades en general corren un riesgo enorme en Venezuela.
“Para nadie es un secreto lo difícil que se ha convertido para nuestros medios de comunicación, para quienes ejercen el periodismo hoy en día cumplir con su función. Función que es vital para todos los ciudadanos, función para que todos podamos saber lo que está pasando en el país, para que podamos conocer lo que ocurre en Venezuela y el mundo”.
Rechazó las agresiones a las que han sido objeto los perdidositas y los medios de comunicación en los últimos años. “Agresiones personales contra sus equipos, han sido perseguidos por los Tribunales, han sido enjuiciados, se les ha aplicado el terrorismo judicial, cada vez es más difícil que los venezolanos podamos tener una información veraz, porque además existe la pretensión por parte del gobierno de tener un monopolio comunicacional”.
William Echeverría, periodista de Globovisión y CNB, en su presentación mostró gráficas del informe 2006, “Venezuela en situación del derecho a la libertad de expresión”, donde se encontraban citados más de cien denuncias de restricción al derecho de libertad de expresión en Venezuela. “De acuerdo al estudio hecho por esta organización no gubernamental 35.1% de los casos se refieren a la intimidación; 15.8% a la agresión; 13.9% a amenazas; 13.9% al hostigamiento judicial”.
Luego de hacer su ponencia sobre casos específicos donde se denunciaron agresiones a perdidositas venezolanos, el profesional de la comunicación preguntó: “¿Es posible la reconciliación en Venezuela?”.
Marcel Granier, Presidente de las Empresas 1BC, destacó que hablar de libertad de expresión, implica hablar de las libertades, los derechos humanos en general y de la democracia.
“la libertad es un derecho natural, humano, precede a toda ley y constitución, está por encima de ellas, y en la medida en que se ejerzan sin dañar a los demás, están por encima de cualquier disposición legal”, dijo Granier.
Explicó que en muchas oportunidades se tiende a simplificar los conceptos de libertad de expresión y el concepto de democracia. “Pensamos que hay Libertad de Expresión cuando una persona puede hablar mal del Presidente de la República, y que hay democracia cuando ocurre un proceso electoral. Pueden ocurrir procesos electorales sin que haya democracia, porque los mismos no son transparentes, porque en ellos el voto no es ni libre, ni secreto, ni limpio, ni se respeta la voluntad del elector”.
Agregó que lo mismo sucede en materia de libertad de expresión, “el que se pueda hablar mal del Presidente de la República o de cualquier persona, no quiere decir que hay libertad de expresión. La libertad de expresión existe cuando una persona puede expresar libremente su pensamiento sin temor a represalias o agresiones”.
De esta manera, hizo mención al caso venezolano. “En el caso de Venezuela, tristemente, el Presidente de la República, ha venido practicando de una consecuente, continua, reiterada, sistemática y metódica un discurso de odio, dirigido a todas aquellas personas que piensan distinto a ellos”.
Proceso involucionario
En otro orden de ideas, para Eduardo Fernández, dirigente de COPEI, señaló que Venezuela está viviendo una coyuntura histórica, y lo que está en juego es un derecho fundamental. “La democracia en general, pero en particular, la libertad de expresión, está grave y severamente amenazada”.
Recalcó la importancia que tiene la información libre, derecho consagrado en todos los convenios internacionales suscritos por Venezuela. Asimismo citó el artículo 57 de la Constitución Nacional, que consagra el derecho a la libertad de expresión y el artículo 58 consagra el derecho a la libertad de información.
Le aclaró al Presidente de la República, Hugo Chávez, que esos derechos le pertenecen a los seres humanos antes de que existiera el Estado. “Por encima del Estado los seres humanos tenemos derecho a la vida y derecho a los derechos fundamentales, dentro de los cuales está la libertad de expresión, de pensamiento y de información”.
También denunció, ante propios y extraños, que en Venezuela está en marcha una estrategia grosera para instaurar un régimen dictatorial, “un régimen absolutista y uno de los elementos fundamentales, una hegemonía mediática que el gobierno pretende establecer para poner en vigencia un pensamiento único y para evitar el debate plural en la población, que permita el surgimiento de alternativas frente al régimen imperante”.
Por último, Alberto Federico Ravell, Director de Globovisión, presentó a la audiencia una serie de videos, donde se mostraba claramente los abusos y agresiones a los que han sido sometido los profesionales de la comunicación.
“El chavismo es una amenaza Latinoamericana”
En otro orden de ideas, Manuel Espino, Presidente de la Organización Demócrata Cristiana de América ODCA y presidente del Partido Acción Nacional de México, expresó su solidaridad a los periodistas de Venezuela por mantener una lucha a favor de la libertad de nuestros pueblos, a la vez que criticó la “amenaza del chavismo” en Latino América.
“La principal amenaza demagógica, populista y autoritaria que pretende desparramarse en nuestro querido continente, tiene su foco principal de infección en Venezuela”, dijo el presidente de ODCA.
Subrayó que en toda la América Latina hay preocupación por lo que sucede en Venezuela. “Muchos somos los latinoamericanos que estamos deseando un cambio de situación en la hermosa Venezuela, también queremos que ese camino sea contagiado al resto de los países latinoamericanos”.
Como presidente de Organización Demócrata Cristiana de América, señaló que en el ejercicio de la responsabilidad de la ODCA propone como un método alternativo al populismo demagógico, autoritario, repensar y rediseñar la democracia en Latinoamérica.
Declaró que uno de los retos y desafíos en el Continente, es que para que haya una democracia abierta, plural, incluyente, se requiere un cambio interior de actitud, “el reto fundamental en este contexto es encontrar una razón superior para unirnos los que pensamos diferentes y buscar los mayores puntos de coincidencia.”
Chavismo es un dolor evitable para Latinoamérica
“El chavismo es una dolencia Latinoamericana, a Chávez lo padecemos en México, allá tenemos más de doscientos círculos bolivarianos que nos han hecho grandes daños sociales”, afirmó Espino.
Destacó que en México, el chavismo se ha metido en procesos electorales, “estuvo punto de imponernos como presidente de la república a un Manuel López Obrador, patrocinado con dinero de todos los venezolanos”.
Dio a conocer que en esa oportunidad, afectos al gobierno de Chávez tomaron las calles y plazas principales de México, “se llegó a proponer las medidas violentas en plena campaña electoral impulsadas por Chávez, los agravios del Presidente venezolano al presidente Mexicano ha sido motivo de dolor nacional. El Chavismo es un dolor evitable para los latinoamericanos”.
Por último agregó que vino a Venezuela para proponer unión entre las regiones, “pero por lo pronto asumamos algo como un pretexto, el chavismo que es una amenaza a la América Latina es un buen pretexto para unirnos en torno de ese propósito fundamental”, concluyó Manuel Espino.
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