Una cooperación del Gobierno Francés dada en cuatro áreas fundamentales, universitaria, técnica, lingüística y cultural; una inversión reciente en el sector petrolero por casi 300 millones de dólares; el rol que juega la cadena casinos al atender el sector alimentario con precios asequibles a sectores menos favorecidos con su cadena de supermercados que precios y éxito además de poseer la marca cada ; y el recobro máximo de operatividad con la marca automotriz Renault, muestran que las relaciones en la esfera económica dan el sustento para la continuidad del compromiso político entre ambas Naciones.
Ser el segundo inversionista extranjero en Venezuela, nos permite afirmar lo que con cautela uno de sus vástagos nos aseguraba, decir a la posteridad lo que es digno de ella, y es que el porvenir de las relaciones económicas entre los dos países se encuentran en un proceso de fortalecimiento, dado no precisamente por el nivel de inversión, sino por el sector al que está dirigido el capital, que viene a estar reforzado por ser un espacio en el cual el Gobierno actual ha prestado su atención, el sector energético, alimentos y transporte principalmente.
La continuidad en lo político se da por confluencia de visiones o por vínculos económicos que juegan un rol específico en las economías internas. No obstante, es más vulnerable la discontinuidad en procesos bilaterales por razones económicas que vienen acompañas de discrecionalidades políticas, que por asuntos estrictamente políticos. La retórica puede funcionar en el tiempo mientras que a su sombra el interés nacional continúa fortaleciéndose, de lo contrario la retórica se convertiría en algo fáctico y perdería su esencia.
La creación de un Ministerio para la Inmigración y la identidad Nacional, Un plan marshall para las comunidades francesas desfavorecidas, la diferencia con la invasión en Irak aunado al llamado hacia los EEUU de avocarse al compromiso ecológico, hace de distingué Sarkozy una figura que jugará bajo una óptica auténtica. Autenticidad que es bien recibida por parte del Gobierno Venezolano, junto con las actuaciones dadas por parte del Gobierno Francés durante escenarios políticos conflictivos. La autenticidad de Sarkozy lo hace aceptablemente reconocido, pero su visión política no precisamente el favorito. El pueblo Francés fue el decidor, para algunos venció en otros no convenció.
El reconocimiento de primus inter pares está dado desde hace 63 años, el fortalecimiento en el nivel económico entre ambos ha sido el suficiente para asegurar que tal aspecto es mutuamente favorable, aunado a la autenticidad que pueda jugar Sarkozy en lo Político, hace que las relaciones entre Venezuela y Francia se puedan observar con una incertidumbre esperanzandora para las dos Naciones.
Ser el segundo inversionista extranjero en Venezuela, nos permite afirmar lo que con cautela uno de sus vástagos nos aseguraba, decir a la posteridad lo que es digno de ella, y es que el porvenir de las relaciones económicas entre los dos países se encuentran en un proceso de fortalecimiento, dado no precisamente por el nivel de inversión, sino por el sector al que está dirigido el capital, que viene a estar reforzado por ser un espacio en el cual el Gobierno actual ha prestado su atención, el sector energético, alimentos y transporte principalmente.
La continuidad en lo político se da por confluencia de visiones o por vínculos económicos que juegan un rol específico en las economías internas. No obstante, es más vulnerable la discontinuidad en procesos bilaterales por razones económicas que vienen acompañas de discrecionalidades políticas, que por asuntos estrictamente políticos. La retórica puede funcionar en el tiempo mientras que a su sombra el interés nacional continúa fortaleciéndose, de lo contrario la retórica se convertiría en algo fáctico y perdería su esencia.
La creación de un Ministerio para la Inmigración y la identidad Nacional, Un plan marshall para las comunidades francesas desfavorecidas, la diferencia con la invasión en Irak aunado al llamado hacia los EEUU de avocarse al compromiso ecológico, hace de distingué Sarkozy una figura que jugará bajo una óptica auténtica. Autenticidad que es bien recibida por parte del Gobierno Venezolano, junto con las actuaciones dadas por parte del Gobierno Francés durante escenarios políticos conflictivos. La autenticidad de Sarkozy lo hace aceptablemente reconocido, pero su visión política no precisamente el favorito. El pueblo Francés fue el decidor, para algunos venció en otros no convenció.
El reconocimiento de primus inter pares está dado desde hace 63 años, el fortalecimiento en el nivel económico entre ambos ha sido el suficiente para asegurar que tal aspecto es mutuamente favorable, aunado a la autenticidad que pueda jugar Sarkozy en lo Político, hace que las relaciones entre Venezuela y Francia se puedan observar con una incertidumbre esperanzandora para las dos Naciones.
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