Venezuela comenzó a cambiar a partir de la descentralización del poder y las regiones encontraron espacios de participación para resolver sus problemas, así lo expresó Luis Carlos Solórzano, vicepresidente de COPEI Partido Popular.
Acotó que la descentralización fortaleció la autonomía y las competencias de los estados y municipios. “Surgió una nueva legitimidad, un liderazgo emergente, un cambio para mejor. Asimismo los estados y municipios pudieron ejercer a plenitud sus competencias propias, más cerca de los ciudadanos para ayudar a solventar los problemas y necesidades de cada localidad”.
Solórzano agregó que la descentralización abrió las puertas a un proceso para acercar el poder al pueblo, donde el ciudadano puede elegir en forma directa a los gobernadores y alcaldes de su estado dependiendo de sus capacidades.
Recordó que se convirtió en un proceso de renovación y refrescamiento del sistema político después de los acontecimientos de febrero de 1989, que permitió además que se consolidara la democracia y resistiera los golpes de quienes intentaron aniquilarla en 1992.
“Podremos fortalecer la democracia venezolana acercando el poder a los ciudadanos, fortaleciendo la participación, y desmontando el aparato administrativo de un estado que pretende monopolizar todas las decisiones que tanto afectan la vida de los venezolanos”.
Según el dirigente del partido popular la descentralización persigue un modelo de Estado democrático y participativo. “Mediante el pluralismo ideológico y político el país tendrá una mejor democracia y justicia social, condición esencial del estado de derecho y de justicia al que todos aspiramos”.
Finalmente señaló que en la medida en que el país se centralice y se debiliten las gobernaciones y las alcaldías, será más difícil que los ciudadanos puedan participar y exponer soluciones para sus comunidades, municipios y estado.
Acotó que la descentralización fortaleció la autonomía y las competencias de los estados y municipios. “Surgió una nueva legitimidad, un liderazgo emergente, un cambio para mejor. Asimismo los estados y municipios pudieron ejercer a plenitud sus competencias propias, más cerca de los ciudadanos para ayudar a solventar los problemas y necesidades de cada localidad”.
Solórzano agregó que la descentralización abrió las puertas a un proceso para acercar el poder al pueblo, donde el ciudadano puede elegir en forma directa a los gobernadores y alcaldes de su estado dependiendo de sus capacidades.
Recordó que se convirtió en un proceso de renovación y refrescamiento del sistema político después de los acontecimientos de febrero de 1989, que permitió además que se consolidara la democracia y resistiera los golpes de quienes intentaron aniquilarla en 1992.
“Podremos fortalecer la democracia venezolana acercando el poder a los ciudadanos, fortaleciendo la participación, y desmontando el aparato administrativo de un estado que pretende monopolizar todas las decisiones que tanto afectan la vida de los venezolanos”.
Según el dirigente del partido popular la descentralización persigue un modelo de Estado democrático y participativo. “Mediante el pluralismo ideológico y político el país tendrá una mejor democracia y justicia social, condición esencial del estado de derecho y de justicia al que todos aspiramos”.
Finalmente señaló que en la medida en que el país se centralice y se debiliten las gobernaciones y las alcaldías, será más difícil que los ciudadanos puedan participar y exponer soluciones para sus comunidades, municipios y estado.
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